No es risotto ni es arroz. Es un arroz cremoso. Esta preparación es sumamente deliciosa y fácil de hacer, pues se cocina todo en una misma olla y no amerita demasiados ingredientes complicados. A pesar de que el arroz de por sí tiene bastante almidón y el queso le aporta cierta cremosidad, esta receta lleva un poco de crema de leche para darle una textura aún más suave y amena. Lleva zanahoria, pollo y guisantes, pero usted puede añadirle otros ingredientes de su preferencia, como maíz, tocineta u hongos.
Ingredientes (para 4 personas):
1 cebolla cortada finamente
2 zanahorias cortadas en rebanadas
3 tallos de célery troceados
2 cucharadas de aceite de oliva, divididas
600 gramos de pechuga de pollo sin piel y troceado
1 cucharada de ajo triturado
1 taza de arroz blanco
2 ½ tazas de caldo de pollo
1 ½ cucharaditas de tomillo fresco troceado
Sal y pimienta negra al gusto recién molida
1 taza de guisantes congelados
½ taza de crema de leche
1/3 de taza de queso parmesano rallado
2 cucharadas de perejil picado finamente
Preparación:
Calentar 1 cucharada y media de aceite de oliva en una sartén mediana, a fuego medio-alto. Añadir las zanahorias, las cebollas y el célery; saltear hasta que estén tiernos, aproximadamente por 8 a 9 minutos. Transferir a un plato.
Calentar el aceite restante en la misma sartén y añadir el pollo; dorar por 3 minutos. Añadir el ajo y cocinar hasta que el pollo esté casi cocido, alrededor de 2 minutos más.
Añadir el arroz, el caldo de pollo y el tomillo. Sazonar con sal y pimienta. Agregar los vegetales. Llevar la mezcla a hervor. Cubrir la sartén hasta que el arroz haya absorbido el líquido y esté casi suave. Eso se puede tardar entre 18 y 20 minutos.
Añadir los guisantes y la crema, cubrir y esperar que el arroz se cocine completamente. Añadir parmesano y el perejil. Servir caliente.
BUEN APETITO!! jcp